Gracias
Dios, por todo lo bueno
y por todo
lo no tan bueno.
Porque de
lo no tan bueno se aprende
y de lo
bueno se disfruta.
Gracias por
las flores, por los ríos
por el mar,
por los amigos.
Pero
también te doy gracias por las situaciones
difíciles
que he tenido que pasar
ya que si
no hubiera tenido esa oportunidad
no tendría
ahora mismo la capacidad
de
disfrutar de mi soledad.
Oh Señor,
estoy de rodillas ante Ti
agradeciéndote
por todo.
Porque me
doy cuenta de que realmente
no estoy
tan sola, Tú estás conmigo
y no veía
mi huella en el camino
porque Tú
me tenías en Tus brazos.
© Zephia 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario