Mi opinión de la novela es que no es
romántica. Hay maltrato a la mujer en muchos sentidos y se practica el
sadomasoquismo; por ejemplo: él le ponía esposas, la obligaba a aguantar la
orina para supuestamente llegar al clímax, la quería sacar de su trabajo,
quitándole la libertad de decidir por sí misma. Además, él era muy violento
durante el acto sexual; era mucho mayor que ella (50 años vs. 23) y tenía
traumas desde su niñez, pero eso no le da derecho a maltratar a nadie. A ella
no le gustaba todo eso; era una muchacha sana, no experimentada, que comenzaba
a vivir toda esa sexualidad a otro nivel: brusca, con objetos sexuales fuertes.
Me parece que es una novela cuyo público son las amas de casa que están
insatisfechas con sus maridos e inseguras en cuanto a su sexualidad. Pienso que
es muy peligrosa porque invita a la violencia y la hace ver como algo bueno y
atractivo. No todo el mundo puede leer esa novela, sobre todo los hombres no
deberían leerla, porque se les puede ir la mano en cuanto a la violencia, si no
conocen los límites entre el placer y el dolor.
©2013 PALO GRIS
LETRAS VIVAS
31 de octubre de 2013
El primer comentario coherente que leo ...ahí puede uno darte cuenta de que bajo la fachada del ser humano se esconden lis mas salvajes instintos primarios sin importar hasta que punto de crueldad puedan llegar a ser...cinismo colectivo, vidas de telón... te aplaudo
ResponderEliminarfíjate que esa es la visión de una de las talleristas; ella es una mujer maltratada que enseguida notó el patrón de abuso del protagonista de la novela. aterrador.
EliminarEstoy de acuerdo contigo. Me pareció bastante absurda y poco realista, y además con lagunas en cuanto a la exploración de los sentimientos. No me parece una gran obra, ni entiendo tampoco el fenómeno que se ha creado frente a una obra insulsa y mediocre. Aparte del desequilibrio que puede hacer salir a la luz del lector proclive a estos maltratos. Muy alejado de lo que puede ser una relación sexual imaginativa y digamos, atrevida, entre dos personas adultas y maduras con cierta experiencia. Ridículo.
ResponderEliminartotalmente de acuerdo contigo, Samuel. saludos.
EliminarNo hay que olvidar que es la primera publicación física de la autora, esto puede justificar de algún modo la ausencia de calidad literaria... Y debo corregirla respecto a la edad de Christian: él tiene 27 años, Ana lo repite varias veces.
EliminarSin embargo es moda, y si hay algo que admiro de la autora es su osadía y la influencia que llegó a ejercer (y ejerce) sobre miles de lectoras en todo el mundo.